Si tu empresa atraviesa una situación económica delicada y no puede hacer frente a sus deudas, el concurso de acreedores puede ser la mejor solución para buscar una salida legal a la crisis e incluso salvar la empresa
En nuestro despacho, somos expertos en derecho concursal y te ayudamos a gestionar cada fase del proceso con el objetivo de proteger tus intereses.
¿Qué es el concurso de acreedores?
El concurso de acreedores es un procedimiento legal que se utiliza cuando una empresa o persona no puede pagar sus deudas de manera regular. Permite reestructurar la deuda, llegar a acuerdos con los acreedores y, en algunos casos, evitar la liquidación. Este proceso ofrece una vía para intentar salvar el negocio o, si no es posible, proceder a una liquidación ordenada, protegiendo tanto al deudor como a los acreedores.
¿Por qué es importante actuar a tiempo?
Tomar la decisión de iniciar un concurso de acreedores de forma proactiva puede marcar la diferencia entre salvar tu negocio o enfrentar un cierre irreversible. Cuanto antes se actúe, más opciones tendrás de negociar con tus acreedores, reestructurar la deuda y darle un nuevo rumbo a la empresa.
¿Cómo te ayudamos?
Asesoría personalizada: Estudiamos tu situación financiera en detalle para determinar la mejor estrategia a seguir.
Gestión integral del concurso: Te acompañamos en todo el proceso, desde la preparación de la solicitud hasta la representación en las negociaciones con los acreedores y ante los tribunales.
Reestructuración y acuerdos: Trabajamos para encontrar soluciones que permitan la continuidad de tu empresa o minimizar las pérdidas si la liquidación es inevitable.
Confía en nosotros para resolver tu situación
Si tu empresa está en una situación de insolvencia, no esperes más. Contacta con nosotros hoy y déjanos ayudarte a explorar las opciones disponibles para resolver tus problemas financieros y proteger tu futuro.
Si ya existe una solicitud de declaración de concurso culpable, necesitas una defensa sólida y rápida para evitar sanciones graves. Nuestro equipo de abogados especializados puede ayudarte a presentar pruebas que demuestren que la insolvencia no fue causada por una mala gestión o fraude, y protegerte de las responsabilidades personales. Contacta con nosotros cuanto antes para analizar tu situación y empezar a trabajar en tu defensa.
La preparación adecuada es clave para enfrentar un concurso de acreedores de manera exitosa. Nosotros te ayudamos a evaluar tus opciones y a preparar una estrategia legal y financiera para mitigar los efectos negativos. Trabajamos en conjunto contigo para anticipar posibles problemas y desarrollar soluciones que protejan tus intereses antes de llegar al concurso.
6 meses como regla general, o menos.
Sí, en muchos casos es posible salvar la empresa a través de un plan de viabilidad o un convenio con los acreedores. En nuestro despacho, analizamos en profundidad la situación de tu empresa y negociamos con los acreedores para evitar la liquidación. Contamos con expertos que te guiarán en cada paso, buscando mantener la actividad y proteger tu patrimonio.
Si tu empresa ya está en concurso de acreedores, es vital preparar una defensa sólida ante la posibilidad de una declaración de concurso culpable. Te ayudaremos a recopilar pruebas, demostrar que la insolvencia no fue causada por negligencia o mala fe, y a protegerte frente a sanciones como la inhabilitación o la responsabilidad personal sobre las deudas. Nuestros abogados tienen experiencia en defender a administradores y conseguir la calificación de concurso fortuito.
Contar con un abogado especializado te permite evitar errores que pueden resultar costosos o incluso llevar a la declaración de concurso culpable. Nuestro despacho tiene una amplia experiencia en gestionar tanto procedimientos concursales como la defensa de administradores en riesgo de inhabilitación. Ofrecemos un asesoramiento integral, desde el diagnóstico de la situación hasta la representación en el proceso judicial, siempre enfocados en proteger tu patrimonio y reputación.
Desde el primer momento te asesoramos sobre si es viable una reestructuración de la deuda o si es necesario presentar un concurso voluntario. Te guiamos durante todo el proceso de concurso de acreedores, defendiendo tus intereses frente a los acreedores y evitando, si es posible, la declaración de concurso culpable. Nuestro objetivo es encontrar la mejor solución para tu caso específico, con un enfoque práctico y estratégico.
Es crucial que sigas ciertas buenas prácticas para protegerte de futuras responsabilidades personales. Nuestro equipo te asesorará sobre cómo llevar una gestión diligente, cumplir con las obligaciones legales y tomar las decisiones correctas para evitar el riesgo de un concurso culpable. Además, te acompañaremos en todo el proceso para que actúes conforme a la ley, minimizando riesgos.
Es fundamental actuar antes de que se produzca la insolvencia. Un asesoramiento legal temprano puede ayudarte a reorganizar las finanzas, renegociar deudas con acreedores y evitar una situación más grave. En nuestro despacho ofrecemos un análisis preventivo y soluciones personalizadas para garantizar la continuidad de tu negocio y evitar, si es posible, llegar al concurso de acreedores.
Durante el concurso de acreedores, la empresa puede estar exenta temporalmente de cumplir ciertas obligaciones tributarias, y los créditos tributarios se ven afectados por el procedimiento, dependiendo de su clasificación. Sin embargo, si se declara concurso culpable, las sanciones fiscales también pueden recaer sobre los administradores responsables.
Sí, la declaración de concurso culpable puede ser objeto de recurso. Los administradores afectados pueden impugnar la resolución judicial ante las instancias superiores, presentando pruebas y argumentos que contradigan la calificación de culpabilidad.
Sí, los administradores pueden minimizar el riesgo de que se declare un concurso culpable adoptando ciertas medidas, como:
- Llevar una contabilidad ordenada y transparente.
- Solicitar el concurso de acreedores en el plazo legal.
- No realizar operaciones que agraven la insolvencia.
- Cumplir con sus deberes de diligencia y actuar en todo momento con la máxima prudencia.
El administrador concursal es una figura clave en el procedimiento. Tiene la responsabilidad de evaluar la gestión del deudor y emitir un informe sobre si considera que la insolvencia ha sido causada por negligencia o fraude. Este informe es esencial para que el juez pueda decidir la calificación del concurso.
La calificación del concurso se realiza al final de la fase común del procedimiento concursal. El juez, tras analizar los informes del administrador concursal y las pruebas aportadas por las partes, determina si la insolvencia es fruto de mala fe o negligencia. En ese caso, el concurso se declarará culpable.
El concurso fortuito ocurre cuando la insolvencia no es imputable a una conducta dolosa o negligente de los administradores o representantes de la empresa. En este caso, no existen las consecuencias negativas para los administradores. En cambio, el concurso culpable atribuye la insolvencia a actos de mala gestión o fraude.
La declaración de concurso culpable puede tener efectos muy perjudiciales para los administradores de la empresa. Entre los más importantes están:
- Inhabilitación: El administrador o representante puede ser inhabilitado para administrar bienes ajenos o representar a cualquier persona durante un período de 2 a 15 años.
- Responsabilidad personal: En algunos casos, el administrador puede ser condenado a responder con su patrimonio personal de una parte o de la totalidad de las deudas que no se cubran con la masa activa del concurso.
- Multas y sanciones: Además de las responsabilidades civiles, se pueden imponer multas administrativas o sanciones penales si se detecta conducta delictiva.
Algunas de las principales causas que pueden llevar a la declaración de concurso culpable son:
- No solicitar el concurso en el plazo legal de dos meses desde que se conoce la insolvencia.
- Falsear la contabilidad, llevarla de manera inadecuada o no llevarla cuando sea obligatorio.
- Alzamiento de bienes, es decir, intentar ocultar bienes para evitar que sean ejecutados por los acreedores.
- Realización de operaciones fraudulentas que incrementen la insolvencia o perjudiquen a los acreedores.
El concurso de acreedores puede ser declarado culpable cuando se demuestra que la insolvencia ha sido causada o agravada por la conducta dolosa o gravemente negligente de los administradores o representantes legales de la empresa. Es decir, cuando los actos u omisiones de los administradores han contribuido a la insolvencia.
Una persona o empresa está en insolvencia cuando no puede cumplir regularmente con sus obligaciones de pago. La Ley Concursal establece que el deudor debe solicitar el concurso en un plazo máximo de dos meses desde que conoce su situación de insolvencia.
El concurso de acreedores es un procedimiento judicial dirigido a resolver la insolvencia de una empresa o persona física. Su objetivo es proteger los intereses de los acreedores y procurar una salida ordenada a la situación de insolvencia, ya sea mediante un convenio con los acreedores o la liquidación de los bienes.